Después de unos días de parón, retomamos nuestras historietas, aunque esta vez vamos a dejar un poco de lado las aves (aunque nunca del todo) para conocer un nuevo destino: Urdos.
Este pueblecito francés situado en el valle de Aspe ha sido el destino (y van ya unas cuantas veces) de mis deseadas y cortas vacaciones :-) A escasas dos horas en coche de Zaragoza (es el primer pueblo una vez pasado el túnel de Somport) es un lugar paradisiaco por su impresionante paisaje, tranquilidad y estupenda gastronomía.
El entorno ofrece un montón de paseos y excursiones de todo tipo de dificultad, desde el Camino de la Madera (una antigua senda de leñadores) hasta un tramo del camino de Santiago, pasando por nuestra ya clásica subida a las antenas, que ofrece una vista preciosa del valle de Aspe.
Vista de Urdos y el valle de Aspe desde el alto de las antenas
A lo largo de estas andadas comprobamos la gran diferencia entre la cara norte de los Pirineos y nuestra vertiente española. Los omnipresentes pinares del lado sur se ven sustituidos por impresionantes bosques de robles, hayas y castaños con densos sotobosques de boj y acebo, que forman un frondoso dosel.